Albóndigas de lenguado en salsa con azafrán
Las albóndigas de pescado son más comunes cada en día tanto para comer en casa como para disfrutar en restaurantes y bares. Se trata de una excelente opción más ligera que las clásicas de carne y muy sabrosas. ¿Te animas a prepararlas?
INGREDIENTES para 4 personas
Para las albóndigas
1 kg de lenguado fresco y limpio
Media cebolla
4 dientes de ajo
Un poco de perejil
Sal y pimienta
Pan rallado
1 huevo batido
Para la salsa
Media cebolla
3 ó 4 dientes de ajo
1 pimiento rojo
1 vaso de vino fino o manzanilla
1 hoja de laurel
1 sobre de azafrán molido
1 puñado de guisantes (pueden ser congelados)
Sal, aceite de oliva virgen extra
Modo de elaboración
Para hacer las albóndigas lo primero será poner la carne de los lenguados en un bol grande. Lo demenuzaremos bien hasta que quede toda homogénea. Luego, picamos el resto de ingredientes muy bien y los añadimos al pescado. Como truco, es muy importante que el lenguado esté bien escurrido, así las albóndigas quedarán mucho más compactas.
Mezclamos bien con ayuda de una cuchara o con las mismas manos, integrando bien todos los ingredientes. Luego, vamos haciendo bolas y pasándolas por huevo y harina dos veces cada albóndiga. Esto es importante para que a la hora de freírlas no se rompan.
Una vez listas todas, ponemos una sartén a fuego medio-fuerte y vamos friendo cada una de las albóndigas con mucho cuidado. No debemos dejar que se hagan demasiado, ya que pueden quedar secas. Además, también debemos tener en cuenta que luego vamos a cocerlas un poco con la salsa.
Para hacer la salsa, vamos a aprovechar el aceite de haber frito las albóndigas. Pondremos el pimiento, la cebolla y los ajos picados y pochamos a fuego medio. Cuando esté todo bien refrito, añadimos el azafrán, el vino y una hoja de laurel. Dejamos todo en el fuego durante unos diez minutos y luego pasamos con la batidora (retiraremos la hoja de laurel antes).
Dejaremos la salsa diez minutos más a fuego medio para que espese bien, y luego añadiremos las albóndigas y el puñado de guisantes. Dejamos durante cinco minutos más para que se integren bien todos los sabores del guiso.
Podemos servir con un poco de arroz blanco o unas patatas fritas para disfrutar de la salsa, ¡no dejarán ni un granito en el plato!
DEJA UNA RESPUESTA