3 trucos fundamentales para hacer el lenguado frito crujiente y jugoso
Una de las delicias más conocidas de la zona sur de españa es el pescaíto frito. Los andaluces tienen esa forma de freír el pescado con la que consiguen deliciosos fritos crujientes por fuera y jugosos por dentro. ¿Cuáles son los trucos para conseguir un lenguado frito rico y sabroso de verdad?
1. La calidad del lenguado debe ser excelente. Ten en cuenta que el lenguado frito apenas se cocina con ingredientes, sólo un poco de sal y harina. Por eso, el producto deber ser fresco y de calidad para disfrutar de un plato cien por cien delicioso.
2. La harina y el aceite son muy importantes. Existen harinas de gran calidad perfectas para freír. Por eso, debemos embadurnar muy bien el lenguado con la harina sin dejar huecos. El aceite debe ser de oliva virgen y de sabor suave, para que no solape el sabor del pescado.
El aceite siempre debe estar limpio y muy caliente, para conseguir que la harina se haga rápido y se selle bien, consiguiendo una jugosidad increíble en el interior. Si dejamos que la harina se empape en aceite frío, no conseguiremos el resultado deseado.
3. Secamos el exceso de grasa. Una vez que sacamos el lenguado del aceite ya frito, lo colocamos durante unos segundos sobre un papel de cocina absorbente para que se vaya todo el exceso de grasa que pudiera haber. No debemos dejarlo demasiado tiempo sobre el papel porque si no se reblandecería el exterior.
El pescado frito en general y el lenguado en particular es una preparación que debe tomarse en el momento. No es aconsejable esperar o dejarlo mucho tiempo, ya que se pierde la esencia de la fritura. Por eso, es muy importante dejarlo todo listo para comer antes de empezar a freír nuestro lenguado: ¡te aseguramos que si sigues estos consejos no fallarás!
Photo credit: avlxyz via Visual hunt / CC BY-NC
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